1. Pecha Kucha Grupo 4
Imagen 1:
Franco Berardi, más conocido por su seudónimo “Bifo” es un escritor y filósofo
italiano, nacido en Bolonia en 1949. Una persona que ha formado parte de diferentes
movimientos culturales y que, en los últimos tiempos, se dedicó a estudiar el
crecimiento de las redes informáticas, y a predecir la explosión de la red como un
fenómeno social y cultural. Analizaremos su libro presentado en febrero de 2008
llamado “Patologías e imaginarios en el semiocapitalismo” donde describe la relación
entre las nuevas tecnologías y la sociedad. Asimismo explicaremos como estás nuevas
tecnologías afectan al ser humano, ya sea en su análisis de la gran masa
de información que recibe, como en su psiquis.
Imagen 2:
SEMIOCAPITALISMO es el modo de producción predominante en una sociedad en la
que todo acto de transformación puede ser sustituido por información y el proceso de
trabajo se realiza a través de la recombinación de signos. Semiótica + capitalismo: los
signos entran en el ciclo de producción de valor. El signo era antes considerado como
una representación más que una movilización de energías valorizantes.
El ciclo de innovación tecnológica es dirigido a la simplificación de los recorridos del
usuario, del consumo, de la interpretación. Por lo que los mensajes deben ser
simplificados para mejorar la transferencia de información y obtener mayor mercancía.
Por esto el enemigo del semiocapitalismo es el significado.

2. Imagen 3:
La aceleración semiótica se da a partir del exceso de signos consumidos por parte del
mercado social de la atención. Esto produce saturación de la atención. Así, la
economía se “apropia” del signo, para producir un efecto dominante sobre la sociedad
y el hombre. El signo no era propiedad de la economía. Podemos decir que esto hace
que cuando la información se presenta como un instrumento de competición, se vuelve
patológica.
Imagen 4:
En los años 90, la alianza entre trabajo cognitivo y capital recombinante forman el
SEMIOCAPITAL RECOMBINANTE. Esto da origen de empresas inmateriales, generadas
por el net-trading (comercio por red), ciclo publicitario, venture capital (capital de
riesgo). Surge bajo la ideología neoliberal que glorifica el mercado y lo describe como
un espacio de autorregulación perfecta. El credo universal de las décadas neoliberales
es la competición, siendo necesaria una inyección masiva de energía agresiva
Imagen 5:
Las empresas multinacionales más poderosas del sector de la comunicación están
tratando de obtener control total del éter, a través de la privatización de la infósfera.
Monopolizan flujos de información de la imaginación humana por medio de la
propiedad electrónica privada. La Disneyficación del imaginario colectivo lleva a la
progresiva pérdida de capacidad imaginativa por parte de las últimas generaciones, en
el conformismo creciente del consumo, estilos de vida y expectativas sobre el mundo.

3. Uniformización de la sensibilidad y del imaginario mundial; perfecta configuración de la
mente colectiva.
Imagen 6:
En los 90 también se da la explosión psicofarmacológica “prozac-economy”. Y su
momento de prozac-crash se da con la sobrecarga informativa que encuentra una
atención más escasa, saturada, próxima a crisis de pánico, con depresión, confusión
mental y desactivación. El cerebro es sometido a estrés por lo que hay inyecciones de
anfetaminas.
Imagen 7:
Luego de la tragedia en Estados Unidos del 11/09/2001 y el post crac argentino en el
mismo año generan un colapso psíquico y descreimiento de políticas liberales.
Comienza el nacionalismo, proteccionismo y paranoia agresiva (impulsado por EE.UU.).
En el ámbito económico se da el agotamiento de inversiones para sectores de
innovación y financiación de las start up (innovación y desarrollo de tecnologías). Las
inversiones de alta tecnología, investigaciones y desarrollos se destinan a la guerra, la
seguridad y militarización. Se corre el peligro de sufrir un desguace masivo del general
intellect (con sometimiento masivo de la inteligencia colectiva a los nacionalismos e
integrismos en conflicto)
Imagen 8:
En la década del 90 se realiza una alianza entre trabajo cognitivo y capital financiero
con la puntocom manía, que permitió el desarrollo de la tecnología y de la cultura en
red, con inversiones publicitarias. Pero la alianza entre capital recombinable financiero

4. y trabajo recombinante cognitivo terminó: la producción de contenidos está inflada con
respecto a las potencialidades de absorción por parte de la atención social global. La
crisis de las bolsas financieras agoto las inversiones en el sector de la innovación. Hay
una reducción del trabajo cognitivo y aparece el empobrecimiento, la desocupación,
etc. (los desocupados son los profesionales, los que innovan).
Imagen 9:
Radio Alice nace en febrero de 1976, tiempo de transición e innovación profunda. Se
da la relación entre procesos sociales y mutación tecnológica. Nació contra las teorías
militantes y dialécticas. Se buscaba abandonar política del leninismo. Se hace famosa
en los 70 y se la asocia con la libertad de expresión que el estado democristiano y
estanilista del compromiso histórico quería censurar, canalizar y suprimir. Referencia
para jóvenes obreros y estudiantes.
Imagen 10:
Enzensberger anuncia que las contradicciones entre las fuerzas de producciones y las
relaciones de producción se extienden al sector de la producción comunicativa y
significante. El hecho de que la producción de significado es subsumida por el proceso
de reproducción del capital. Así se buscaba la recuperación de la verdad en la
información, en reafirmar el valor de uso del proceso de significación para oponerlo al
servicio del capital.

5. Imagen 11:
Baudrillard cree que el proceso de mercantilización afecta a la estructura misma del
mensaje. Lo que caracteriza a los mass media es el hecho de que son antimediadores,
intransitivos y que fabrican la no comunicación (si aceptamos definir la comunicación
como un intercambio recíproco con responsabilidad). El efecto de la comunicación
sobre la sociedad depende en buena parte de las modalidades relacionales que la
tecnología pone a disposición de los actores de la partida, y no sólo de las
intencionalidades ideológicas o políticas de los actores sociales.
Imagen 12:
Entre los siglos XIX y XX se desarrollaron y difundieron tecnologías de reproducción
técnica de la imagen y del sonido, permitiendo modificar la infósfera. De todos modos
estos medios, la fotografía, el cine, la radio, y la televisión, han sido inaccesibles por
mucho tiempo para gran parte de la población, otorgando poder a un pequeño grupo
que podía acceder a ellos. Estos eran instrumentos caros y raros.
Imagen 13:
Entre los años 60 y 70 se crearon condiciones para una difusión masiva de los
instrumentos técnicos de producción semiótica, de la cultura, del arte y la información.
Aquí es donde la difusión de tecnologías de producción comunicativa se convierte en
un fenómeno de masas. Desde el punto de vista del consumo, esto significa que la
infósfera (la esfera en la que circulan las señales portadoras de intención cultural) se
hace cada vez más densa, más espesa, con efectos sociales y culturales. Los
instrumentos que aparecieron para la masificación del producto semiótico fueron la

6. fotocopiadora (permitió la duplicación simple y económica), el Offset (permitió copias
en un número mucho mayor que la primera, con el uso de color), la radio (transmisión
radiofónica de bajo costo que se consolidó como un instrumento de información
independiente del poder político), y el videocasete. Después de los 70 el desarrollo de
las tecnologías fue rapidísimo, quedando obsoletos los primero.
Imagen 14:
A partir de los 80, se difundieron las nuevas tecnologías y arrancó el proceso de
mentalización de la producción de mercancías. Hoy se puede decir que el trabajo
creativo mediante la alta tecnología se ha convertido en el factor decisivo del proceso
de producción globalizado. Este sector es el más productivo, dinámico, y que permite
obtener una transformación importante. A este tipo de trabajo también se los llama
trabajo en red, o infoproducción.
Imagen 15:
La MEDIASCAPE es el sistema mediático en continua evolución; el universo de los
emisores que envían a nuestro cerebro señales en los más variados formatos. La
infósfera es la interfaz entre el sistema de los medios y la mente que recibe sus
señales (ecósfera mental).
La mente es el universo de los receptores, que no se limitan a recibir, sino que
elaboran, crean, y ponen en marcha nuevos procesos de emisión y producen la
continua evolución del mediascape. Esta evolución no se corresponde con la capacidad
de recepción. En esta saturación hay un desfase de formatos.

7. Imagen 16:
El formato del universo de los emisores ha evolucionado multiplicando su potencia,
mientras que el formato del universo de los receptores no ha podido evolucionar al
mismo ritmo, por la sencilla razón de que se apoya en un soporte orgánico – el cerebro
– cuerpo humano – que tiene tiempos de evolución completamente diferentes a los de
las máquinas.
En una situación así, la comunicación se convierte en un proceso asimétrico y
trastornado.
Imagen 17:
Se habla de un ciberespacio y un cibertiempo. El primero es una red que comprende
componentes mecánicos y orgánicos cuya potencia de elaboración puede ser acelerada
sin límites. El cibertiempo en cambio es una realidad vivida, un soporte orgánico –
cerebro y cuerpo humanos- cuyo tiempo de elaboración no puede ser acelerado más
allá de sus límites naturales relativamente rígidos.
Imagen 18:
Según Virilio, la velocidad es el factor decisivo de la historia moderna. En cierto sentido
se puede decir que el espacio ya no existe, porque la información lo puede atravesar
instantáneamente y los acontecimientos pueden transmitirse en tiempo real de un
punto a otro del planeta, convirtiéndose así en acontecimientos virtualmente
compartidos. Los individuos no están en condiciones de elaborar tanta información,
pero esta misma es indispensable seguir, conocer, valorar toda esta información si se

8. quiere ser competitivo, eficiente y ganador (multitasking: realización simultánea y en
paralelo de más de una tarea). Esto se demuestra en la dislexia, una incapacidad de
leer siguiendo un proceso secuencial y de mantener la atención concentrada en el
mismo objeto por mucho tiempo.
Imagen 19:
En la virtualización el otro debe aparecer como información, por lo que debe ser
elaborado con rapidez. Como consecuencia de su ingobernable velocidad, los
automatismos técnicos se vuelven independientes de la voluntad y de la acción
humana. La aceleración recorta drásticamente los tiempos que serian necesarios para
la elaboración racional y emocional de la información. No hay ya posibilidad de elegir
porque todo se desarrolla de prisa, porque la atención está saturada. Esta atención es
sólo canalizada por unos pocos grupos económicos mundiales que influyen sobre el
comportamiento, las expectativas, las decisiones de consumo y las elecciones políticas.
Imagen 20:
Dos discursos sobre la innovación tecnodigital y efectos sociales: los apologistas de la
evolución crearon una teoría de la inteligencia colectiva de potencia ilimitada y capaz
de autogobernarse. Los apologistas no ven el sufrimiento físico, miseria económica y
violencia militar que acompañan la difusión de tecnologías digitales.
La globalización afectó al imaginario planetario. Se produjo deslocalización cultural,
desarraigo y fusión de estilos. Se produce una auténtica mutación cognitiva. Hay un
bombardeo de impulsos informativos intensos veloz e invasivo. El acceso al lenguaje
ha sido siempre acceso a la sociabilidad. Lenguaje y sociabilidad están mediados por la
afectividad, seguridad y placer que proviene de la madre. Pero este fue sustraído y
separado en las últimas generaciones, ya que el capitalismo liberal y la privatización de
los seres sociales creó las condiciones para que las mujeres se vieran forzadas a
asumir situaciones de doble trabajo y empobrecimiento afectivo. La presencia de la
madre fue sustituida por la presencia de la máquina lo que afectó la transmisión del
lenguaje. Las emociones sin palabras alimentan la psicopatía y la violencia, y las
palabras sin emoción alimentan una sociabilidad cada vez más pobre, reducida a la
lógica de dar y tener. De esto debe ocuparse el activismo mediático.